Haga conversación

Prepare un ambiente con un lenguaje detallado

  • Usted y todos los otros adultos en el mundo de su hijo constituyen su entorno lingüístico. Asegúrese de que usted y todo el que esté involucrado en su vida esté consciente de lo importante que es utilizar el lenguaje expresivo detalladamente todo el tiempo.
  • Asegúrese de que todo aquél que pase tiempo con el niño comprenda la importancia de responder a sus esfuerzos por decir palabras y comunicarse en este momento. Él se está esforzando mucho y cuando este esfuerzo se le reconoce, se le anima a seguir intentándolo. Sin embargo, si nadie se da cuenta de esto, él puede sentir que sus esfuerzos son inútiles y dejar de intentar.

Conecte a su hijo con los detalles de la lengua a través de sus experiencias cotidianas

  • El nombre de cada objeto que se utiliza para el baño, la limpieza, la preparación de la comida, del vestido y el mantenimiento de la vida de la familia es una palabra que su hijo aprenderá. Al nombrar los objetos usted también debe explicar su función. Por ejemplo, hay cucharas para bebés, cucharas de sopa, cucharones, cucharas de medir y cucharas de té. Asegúrese de utilizar este tipo de palabras en vez de llamar a todo, cuchara. No se preocupe de que estas palabras puedan ser demasiado complejas para su hijo. Estas palabras precisas tendrán sentido para él cuando se utilicen en el contexto de su vida diaria y además se enriquecerá su lenguaje.
  • Empleé correctamente la gramática y frases completas cuando sea posible. Use con su hijo un lenguaje que le ofrezca un buen modelo de expresión clara para que todos puedan entenderlo.

Tómese tiempo para conversar

  • Tendrá que esperar pacientemente a que surja una conversación. Las palabras que su hijo entiende siempre serán más que las palabras que él use. Usted puede decirle que vaya a buscar sus zapatos y él se deslizará a través de la habitación para encontrarlos mucho antes de que pueda sostenerlos en el aire y decir: "Mamá he encontrado mis zapatos". Tendrá que tener la suficiente paciencia para tener, al principio, conversaciones unilaterales e interpretar lo que está tratando de decir.